Una cláusula de ‘oro’ que penalice a los jugadores mediáticos…
Los millones que cobran determinados futbolistas son poco menos que un escándalo para las masas sociales ya que, a pesar de rubricar contratos de estrella, generando –normalmente- pingües beneficios, no siempre se cumple con las expectativas de los clubes que les ficharon por unos impensables millones que no se ven reflejados en resultados y que, pese a ello, siguen cobrando sueldos impresionantes. Todos sabemos quiénes son esos jugadores y las decepciones que han causado a su club y a los aficionados. De ahí, la reflexión que se nos ocurre, seguida de una peculiar pregunta: Así como en puestosde ejecutivos o simples trabajos de despacho se penaliza la ausencia de objetivos propuestos… ¿No se debería incluir una cláusula en esos contratos siderales que penalizara el fallar goles “cantados”, penaltis, jornadas negativas y un largo etcétera que permitiera a los clubes reducir los ingresos de esos jugadores en proporción a los rendimientos obtenidos?
No sería nada descabellado… “Tú me das, yo te doy…” “Tú no aciertas, el club te penaliza económicamente”.
Y ni qué decir de la penalización económica que podría sufrir la versión de Messi en el pasado enfrentamiento con el PSG ya que un jugador, con semejantes ingresos no puede deambular por el campo ante una confrontación que significa tanto para el club.
Y al hablar de penaltis fallidos, no sólo Ronaldo (con aproximadamente unos 25 fallos en unas 160 ocasiones) o Messi (que sin contar nuevos datos que se pudieran producir más allá de esta edición: no acertó en 24 penaltis de 120 ocasiones) han errado cantidad de ellos a lo largo de sus trayectorias, sino también muchas estrellas y en contiendas fundamentales para la camiseta que defienden: Tévez, para Argentina, ante Uruguay, en cuartos de final de la Copa América. Xabi Alonso, ante Paraguay, en la Copa del Mundo 2010. Beckham, en la Eurocopa de 2004. Maradona, jugando en el Boca Juniors falló cinco penales consecutivos; Pelé, varias veces; Roberto Baggio, un penal decisivo en la final de la Copa del Mundo en el 94. Zico: no convirtió ante Francia, lo que podría haber cambiado la historia de su Selección de Brasil en la Copa del Mundo del 86. Zidane, Falló varios penales a lo largo de su carrera. Michel Platini, el día que cumplía 31 años, falló en cuartos de final de la Copa del Mundo…Y así, podríamos seguir ya que se trata de una lista in-ter-mi-na-ble, sin olvidarnos de los fallos garrafales no atribuibles a imponderables físicos, sino a errores técnicos que no deberían incluirse en tantos mediáticos que disfrutan de esos contratos millonarios.
¿Algún club se atrevería –a la hora de cerrar condiciones contractuales- a incluir esa cláusula de ‘oro’ antes de estampar las rúbricas definitivas? El jugador que se negara, no tendría argumento para la exigencia económica que se estuviera barajando en los despachos, ya que así como se incluyen primas por rendimientos positivos, esta penalización económica, marcaría un antes y un después en determinados contratos millonarios en los que el club, obtendría un objetivo inédito.
¿Sería viable legalmente? Por qué no…A la exigencia millonaria que plantee un apoderado se le responde con esa cláusula que no tendría por qué afectar a la negociación, pero la institución, como decimos, se cubriría ante algunos contratos abultadísimos que han resultado poco menos que un fiasco. No hay más que ver a algunas estrellas por las que se han pagado más de cien millones que no han dado satisfacción alguna a sus clubes que, en los tiempos que corren, siguen pagando sueldos surrealistas.