SE CUMPLEN 65 AÑOS DE “EL PARTIDO DE LA NIEVE”…
ENTRE EL REAL MADRID Y EL PARTIZÁN
Al recordar la reciente y gran nevada que afectó la liga con algunas excepciones en tierras navarras, como el que protagonizaron hace algunas semanas, Osasuna y Real Madrid, nuestro inquieto Caleidoscopio, nos lleva –esta vez- a un encuentro que protagonizó, precisamente, el Real Madrid frente al Partizán y que en su día fue bautizado como “el partido de la nieve”, disputado la noche del 28 al 29 de enero durante una impresionante nevada que prácticamente sepultó la capital yugoslava y del que acaban de cumplirse 65 años.
Allí estaba Bernabéu quien, a pesar de ver el campo lleno de nieve y de placas de hielo, no dudó en tomar una decisión: “Hemos venido a jugar –dijo- y lo haremos.”
Un encuentro que es recordado como épico por parte del Real Madrid en la Copa de Europa que luchaba por un puesto en las semifinales de aquella primera edición del torneo continental y en el que, según vemos en el infalible recorrido caleidoscopiano: el Madrid llevaba una renta de 4 a 0, a favor.
Un enfrentamiento, sin duda para enmarcar en nuestros recorridos históricos, ya que en aquellos nevados y congelados minutos, hubo de todo: incluyendo una bola de nieve con una piedra dentro que le fue arrojada a Villalonga, el míster madrileño.
Vayamos recordando aquella hazaña que dejó en blanco a más de uno…
Comenzó el partido y los madridistas apenas podían mantenerse en pie, todo lo contrario a los acostumbrados balcánicos que abrieron el marcador con gol de Milutinovic. Al final del primer tiempo, el suizo Guide, pitó penalti a favor de los blancos pero Rial, encargado de chutar la pena máxima, se resbaló al hacerlo y el balón salió desviado.
Los yugoslavos iban a por todas habiéndose rociado las botas (según ‘truco’ que ya habían experimentado con éxito en otras contiendas parecidas) con gasóleo, para mantener la verticalidad; y, como se esperaba, en el descanso, los blancos, que recibieron el dato, copiaron la idea pero de poco les valió ya que los yugoslavos marcaron dos goles más, disminuyendo la renta blanca a un sólo tanto. La nieve ‘paralizó’ cualquier táctica y creó un desconcierto en el que, incluso Becerril, que se rompió un pie, siguió jugando sin enterarse de que se había fracturado…
Un recordado “partido de la nieve” que anuló a un Real Madrid que se salvó por el encuentro de ida, enfrentándose al Milán, en semifinales…