RICARDO DARÍN: “No dejo de agradecer todo lo que me ha dado la vida…”

Ricardo Darín es alguien que, al tratarlo, en las distancias cortas, gana, por su personalidad tan cercana, aun más…

Recibe premios, sigue creciendo, se lo disputan en teatro, en televisión y sus películas arrasan pero él, no cambia ni un ápice su “campechana” forma de ser.

Desde la primera entrevista que le realizamos en su Buenos Aires natal, antes de que nos ocupáramos del proyecto artístico en España de una jovencísima Andrea del Boca con la que debutó con “Estrellita mía” en los llamados “culebrones”, hasta hoy, Ricardo, sigue siendo el mismo, como si nunca hubiese salido del barrio y dueño de un espíritu con el que conquista a todo el mundo.

Corría el año 87 y él, sin saber naturalmente lo que le tenía deparado el destino como actor de películas tan taquilleras, comenzaba junto a Andrea del Boca, su andadura como actor de telenovelas.

Dos años después (cuando llevaba apenas un año de casado con su querida esposa Florencia Bas), como recordarán los aficionados al género, protagonizó “Rebelde”, junto a Grecia Colmenares. Y de ahí, en más, su carrera fue imparable.

Hoy: ante una nuevo estreno cinematográfico, vuelve a triunfar  en los Teatros del Canal  (sólo hasta el 22 de octubre) junto a  su compatriota, la actriz Andrea Prieta con la obra “Escenas de la vida conyugal”, comedia dramática escrita por Ingmar Bergman y dirigida por Norma Aleandro.

¿De dónde sacas tanto tiempo, tanto buen humor y tanta sencillez, Ricardo?

Ni yo mismo lo sé pero será por la fuerza de mi juventud… -nos comentó con una amplia sonrisa y recordándonos que nació en enero del 57.

Qué les puedo decir, que llevo una vida organizada y que aunque me espera un palizón de compromisos, no dejo de agradecer lo que me ha dado, lo que me da la vida…

Hace un par de años fue distinguido (entre otros tantos premios) con la Concha de Plata al Mejor Actor en el Festival de Cine de San Sebastián por “Truman”…

¿Y recientemente Ricardo, has recibido un nuevo premio: el “Donostia”?

Sí y por más que la noche anterior estuve pensando lo que iba a decir en mis palabras de agradecimiento, a la mañana siguiente no me acordaba de nada porque, después, con la emoción…Ya sabemos lo que pasa. El Donostia es, probablemente, el premio más importante de mi vida, por lo que significa, pero también por parte de quienes viene: de una ciudad y una gente a la que adoro desde el primer día…

Cuando comenzamos a tratarle en Argentina, hace años, cada día permitía que le llamásemos a su casa para que nos dijera dónde iban a ser –día a día- las localizaciones de aquella primera telenovela que protagonizaba.

¿Imaginabas semejante éxito después en España como primera figura de un cine tan codiciado por el espectador?

Un actor siempre anhela lo mejor, pero soñar con un éxito… ¡Sí sueñas pero que lo puedas “tocar” con tus manos…! ¡ Adoro España y a su gente.

Lo increíble del “éxito Darín” es que esa misma gente, por ejemplo, cuando se acerca a la taquilla de un cine para  ver sus películas, no suele decir: “Déme una entrada para “Nueva Reinas”, por ejemplo o “para “Un cuento Chino” ó “Para Nieve Negra”,  o  “para “La Cordillera”, (su último trabajo en el que interpreta a un Presidente Argentino)…No,  lo grandioso, lo llamativo -y él lo sabe- es que el espectador se acerca a la taquilla y simplemente dice: “Una entrada para “la de Darín!!”…

“Y esocomenta, agradecido te llena de satisfacción, de emoción, es un sentimiento único.”

Pero único también es Darín fuera del celuloide: ocurrente, dicharachero, amable, respetuoso y agradecido al periodista y bromista.

Por ejemplo, en la sesión de fotografías que le realizamos para este reportaje, en algunas instantáneas –como verán- aparece con gafas oscuras…Pues bien, al ponérselas, con gesto serio y creíble, nos dijo:

Me pongo estas gafas porque son de un amigo, por favor publiquen alguna foto donde se me vea con ellas porque a él le echo un capote y ¡¡yo me llevo una comisión!!

Es así, en casi todo y también muy humano con actitudes que emocionan.

Días antes de viajar a España Ricardo y su mujer,  salieron a dar un paseo por el Barrio de  Palermo de la capital Argentina, cuando, al pasar por las calles Cabrera y Bonpland, tuvieron que olvidarse por completo de su relax, acudiendo en auxilio de un hombre que se encontraba tirado en medio de la calle, completamente derrotado por una angustia que padecía y corriendo el riesgo de ser atropellado. Primero se ocuparon de él, tratando de apaciguar es mal estado de ánimo personal que lo turbaba y, después, llamaron a los servicios correspondientes para que ese pobre hombre se recuperase…

Darín, cinematográfico sí, pero también real…

Vive su mejor momento pero él, como decimos, no cambia. Igual va en vaquero y con chupa negra que con pajarita. Es un actor, una persona, que ha calado hondo en el espectador de todas las edades que le conocen por alguna que otra entrevista y por sus trabajos ( “El hijo de la novia”, “Luna de Avellaneda”, “El Aura”, “Carancho”, “Elefante Blanco”, “El Secreto de sus ojos” (galardonada con el premio Óscar a la mejor película de habla no inglesa en la edición 82 de los “Academy Awards”) “Tesis sobre un homicidio”, “Relatos Salvajes” (film por el que fue nominado por tercera vez a los Premios Goya y largo etcétera).

Conocemos al Darín de la gran pantalla y conocemos algo de él por alguna que otra manifestación pública, pero la gran mayoría de sus admiradores, seguramente,  no han podido “bucear” en otros aspectos de su vida como hoy lo intentamos hacer en ALGENTE.

“Hice la primaria en la Escuela Mariano Acosta…” –recuerda, antes de detenerse en la importancia de la educación y en lo que pueden llegar a marcar aquellos primeros años a un adolescente-.

La educación que “se mama” desde que nacemos, es algo primordial. Y esto es parte de la filosofía de un Darín que incluso, como invitado de Radio Mitre (una popular emisora porteña), al ser preguntado sobre cómo ve a su país en la actualidad, además de otras cuestiones, subrayó:

«En algunos aspectos creo que hay evoluciones y en otros creo que hay deterioros (…) Lo que más me preocupa es la educación (…) Es difícil mantener el estado de ánimo y tener una energía positiva, porque las cosas más importantes no pueden ser de hoy para mañana…Aunque mañana todo el mundo coma y todo el mundo tenga vivienda y trabajo, hay un tema de educación –recalcó- que nos va a llevar mucho tiempo poder reestructurar.»

Y yendo aun más lejos, al hablar sobre la  inseguridad que se palpa en las calles, dando un ejemplo que se ve cada día en los telediarios bonaerenses, puntualizó con gran preocupación:

«¿Por qué dos tipos que le roban el móvil y la mochila a un pibe, una vez que lo hicieron, se suben a la moto y le pegan tres tiros?». «No lo puedo entender, ahí hay odio (…) Hay odio dando vueltas y alguien tiene que hacer algo al respecto», concluyó.

Este es el Darín que no conocemos, socialmente preocupado por otro tipo de guiones que son los que desgraciadamente proliferan en las sociedades actuales.

Al preguntarle sobre la corrupción en general dice lo que piensa y lo hace sin tapujos:

«Estamos acostumbrados a hablar de lo que se llama coima (pagar para que la autoridad “mire para otro lado”, por ejemplo, cuando se comete una infracción). Hablamos de “la coima” pero no entonamos un “mea culpa”.

¡Es la sociedad, con procederes que ayudan a ello, la que admite la corrupción!

Este Darín que no acepta lo que es “normal” dentro de los cánones sociales en los que uno crece y que, como ser humano hecho y derecho que tuvo que “atravesar” lo suyo para llegar hasta aquí, tampoco da carpetazo –no lo sabíamos, como veremos-  a ciertos recuerdos de cuando era niño.

En este sentido, tras felicitar a un gran profesional de la radio de su país, debemos rescatar una genial entrevista que le hizo el  periodista Julio Leiva en Radio Vorterix. Una entrevista personal, directa, sincera que dio por resultado unas comillas en boca de Ricardo que hablan por sí solas y que transcribimos literalmente:

“Yo aprendí a convivir con la violencia propia, desde muy chico. Yo era un niño muy flaquito, muy vulnerable, frágil físicamente. Yo padecí bastante mi escuela primaria, me resultaba hostil, permanentemente había una confrontación física a ver quien la tenía más larga”.

Y lo confiesa haciéndonos pensar en un tema que por desgracia es de plena actualidad en las aulas, en los recreos de tantos colegios españoles.

«En la escuela –prosiguió su relato, textual- había algo mío que molestaba porque sino, no entiendo por qué recibí tantas agresiones. Les parecía que era un acto de soberbia de mi parte intentar hablar bien, eso me valió varias palizas, todos los días era sobrevivir…”

Y sobre la fama y el ser famoso, dijo textualmente:

“La fama en sí misma no es un valor… ¡Vos no podés querer ser famoso! ¡Es como querer ser pelotudo!”

Sus padres fueron artistas como él, y ellos le dieron “su primera oportunidad” cuando apenas tenía diez años.

Después llegaría a su vida la ocasión que le dio el prolífico escritor televisivo, Alberto Migré hasta convertirse en uno de los galanes jóvenes más codiciados de la televisión argentina.

Y ese buen humor nato le ayudó mucho para triunfar en la pequeña pantalla de su país con el que, entonces, fue su mayor éxito: “Mi cuñado”.

Llegó a participar en infinidad de largometrajes aunque su verdadero éxito llegaría con “El hijo de la novia” y más tarde, con“Nueve Reinas”, films bien conocidos por el público español.

Probablemente unos cuantos admiradores de nuestro protagonista, no saben que en el año 2006 le fue concedida la nacionalidad española, tal como se dice: “por carta de naturaleza,” concesión especial del Reino de España a personas que reúnen particulares méritos.

Más allá de sus películas, como hemos visto, nos encontramos con un  Darín, como decíamos, al que no conocíamos. Y sobre el que, en este sentido, todavía hay más ya que, es un ser humano que sorprende ¡Y mucho! con una actitud, con un proceder, como el que tuvo ante la prensa cuando un grupo de desconocidos: tres hombres y una mujer, asaltaron su residencia.

Si ya le hemos podido conocer por algunos rasgos de su perfil tal como hemos leído en este exhaustivo “viaje” por algunas facetas de su vida, lo que les contamos ahora, puede que les sorprende aun más.

Veamos:

Tras un robo y un secuestro momentáneo que sufrió en su residencia, Ricardo, salió a la puerta de su casa y, mientras pedía más oportunidades para los jóvenes como los que acababan de desvalijarle y de haberles hecho pasar un gran susto a él y a su familia, dijo con unas comillas literales como se reflejó oportunamente:

“Agradezco que no maltrataran a mi mujer y a mi hija, que son las cosas más preciadas que tengo en esta vida y  que no nos hubieran tocado  (porque habría sido inimaginable) unos pibes jodidos, resentidos. Yo no pido la guillotina para esos tipos. Pido mejores oportunidades. Uno de los pibes estaba encerrado en el cuarto con mi hija mientras le decía: «No te pongás nerviosa, yo hago esto porque no me queda otra, no porque quiero; quedáte tranquila que tengo una hermana de tu edad. No te voy a hacer nada, ni te miro». Ese tipo no es un asesino, pero nadie se ocupa de esta gente. No sé… yo trato de ver más allá de mi pequeña vida y de funcionar coherentemente con eso que pienso.”

Lo que decíamos: Un Darín increíble, en la pantalla, en la vida.

Un Darín cinematográfico, sí, pero también…Un Ricardo Darín, real…