MESSI, HA VUELTO…

Una vez más, si, una vez más, nuestro caleidoscopio que va y viene, vuelve a detenerse, forzosamente, en Messi  pues, contrariamente a lo que todo el mundo presumía –incluyendo a sus paisanos entre los primeros-, ha comenzado y continuado la Liga con pie derecho, aunque sea su zurda la que “entró” en juego sorprendiendo una vez más a casi todos y desde el minuto uno…

Después de un mundial negro para el diez del Barça, al revés de lo que elucubraban no pocos comentaristas e incluso algún que otro psicólogo rioplatense que predecía “un regreso complicado tras la falta de éxito colectivo y personal en Rusia”, Leo,  ha vuelto con las pilas súper cargadas, dejando patente su indiscutible virtud futbolística…

Le vimos, le vemos con más frescura a pesar de los asados criollos, los choripan y las milanesas a la napolitana que seguramente habrán formado parte de su descanso en su Rosario natal.

Messi, disciplinado y mesurado en su cotidianeidad, ha sabido cuidarse y reinventarse dejándose ver más rápido y más dispuesto, con ganas de reencontrarse con el fútbol que le consagró mundialmente. Y, a la vista está: con esa inteligencia que sorprende en su visión de juego, por ejemplo, en ese tiro libre en su debut liguero frente al Alavés, chutando a ras del suelo mientras en milésima de segundos pensaba que la barrera saltaría como suele ser habitual.

Aunque el Barcelona cuenta con jugadores que no están defraudando las expectativas creadas y con un Coutinho que cuando “explote” de verdad –va en ese camino- eclipsará (desde su posición) el recuerdo del propio Neymar, nos preguntamos qué será de este equipo cuando Messi no esté.

En ese sentido, seguro que los madridistas ya acusan –marcase o no- la ausencia de Cristiano.

Jugadores que por su sola presencia en el campo, valen lo que valen y que nos hacen señalar ciertos traspasos como desorbitados económicamente, desde que el precio de Neymar que pagó el PSG, “rompió” el mercado.

En la anterior edición, haciéndonos eco de comentarios de profesionales argentinos, nos preguntábamos si Messi volvería “mermado” tras su deambular por el mundial de Rusia.

Hoy, vemos que (al igual que Ronaldo en la Juve), este tipo de ídolos mediáticos, nacieron para triunfar más allá de “malas rachas” porque, si bien es cierto que a Messi, la presión de la camiseta albiceleste le ha pasado factura negativa, nuestra Liga y el Barcelona lo motivan para disfrute de los amantes del fútbol.

Messi, sin duda, ha vuelto.