JAVIER SANZ “¡Stop plásticos en los océanos!”
Javier Sanz nadando alrededor de la isla de Manhattan, ha dejado su mensaje al mundo:
“¡Plásticos no! ¡Stop plásticos en los océanos!”
Desde su nueva travesía que una vez más se convierte en un ejemplo para la sociedad, nuestro admirado protagonista, no ha parado.
¿Y ya tienes un nuevo reto por otra causa?
Me he planteado nadar durante 24 horas por relevos en el Canal de nado de Alicante por los pacientes de AEAL, es decir: los que sufren linfoma, mieloma, leucemia y síndromes mieloproliferativos pero las recientes borrascas han desaconsejado hacerlo y me plantearé nuevos retos para más adelante. Tal vez decidiré ‘ fugarme’ de la isla de Alcatraz hasta la Bahía de San Francisco, nadando en aguas súper heladas o haga con unos compañeros un ida y vuelta por el estrecho de Gibraltar…
Lo dicho, no paras… Pero vayamos a tu última proeza:
¿Nadaste unos 50 kilómetros sin parar?
Fueron 48 kilómetros alrededor de Manhattan durante 8 horas y 28 minutos con el agua a 22 grados y sin traje de neopreno.

Javier pone toda su pasión en lo que hace y no es para menos ya que “así” está cierta parte de este mundo nuestro de cada día que tanto necesita de la solidaridad, dedicación y altruismo de abnegados deportistas como nuestro entrevistado, quien, con el corazón en la mano dice a ALGENTE:
…Y así, minuto a minuto, con un gran esfuerzo y una gran motivación, todo por un único mensaje: que el plástico deje de ser un problema tan grave en los mares del mundo –es lo que subraya con el corazón en la mano y, agrega:
Quiero hacer ver que podemos hacer cosas increíbles y que con esfuerzo, entre todos, vamos a ganar la batalla a los plásticos de un solo uso.
Estuvimos cerca de él cuando cumplió con este gran reto deportivo en verano y cómo no, ahora, en Alcobendas, donde este excelente nadador y respetadísimo ser humano, conversa con “Tú Revista”, no sin antes dedicarle unas palabras a su reciente proeza:
Bueno lo cierto es que todo salió perfecto, cogimos muy bien las mareas y aunque tuvimos viento en contra gran parte del recorrido no hubo percances y mi cuerpo funcionó como mi entrenador esperaba. Tengo un gran equipo y eso lo facilita todo.
¿Es verdad que te preocupa más el plástico en los océanos que los eventuales peligros que encontremos en ellos?
Creo que la gente conoce poco el mar, si te refieres a los tiburones no van por ahí comiendo nadadores. Los verdaderos monstruos marinos son los desechos que estamos tirando, los plásticos están ahogando y envenenado a la fauna..
…Con unos resultados catastróficos.
Estamos rompiendo el ecosistema marino y creo que aún somos capaces de solucionar este problema y hay que empezar desde casa.
Javier nos menciona algunos trabajos que hablan a las claras de lo preocupante que es la situación por la que él -dando ejemplo- lucha:
Según leemos en diferentes trabajos de minuciosos investigadores, los propios glaciares “contienen micro plásticos de escasos milímetros” que poco a poco por actitudes incivilizadas y por el paso del tiempo, se han convertido en un gran problema para el planeta.
¿No crees que acabar con esto tan importante es poco menos que una utopía por la negligencia e incultura social de no pocos?
Utópico era hace unas décadas ir a la luna o enviar una foto a través de un teléfono al otro lado del mundo.
¿Y el “hoy por hoy”, entonces?
Yo creo en las personas… ¡¡Vamos a ser capaces de arreglar esto!! pero hay que empezar ya. Entre todos, no vamos a esperar a que los gobernantes o fabricantes cambien leyes o embalses. Vamos a dejar de usar confeti, pajitas de plástico, globos y todos esos plásticos de un solo uso. Como consumidores tenemos el poder de elegir.
La sinceridad de nuestro anfitrión llega hasta límites que marcan la pauta real de una conducta. Así nos dice:
Te confieso que he vuelto al botijo para tener agua fresquita.
En su día en una amplia entrevista que “Tu Revista” realizó a los responsables de Green Peace, pudimos conocer muy de cerca este problema mundial en el que cada segundo son unos 200 kilos de plásticos los que se vierten al mar.
¡Cada año: más de 8 millones de toneladas!
Y Javier quiso realizar este reto, precisamente, al lado de Nueva York que, con 14 millones de toneladas de plástico arrojadas, anualmente, se convierte en la ciudad que más basura genera del mundo.
Tras recorrer los tres ríos que rodean la isla: el Harlem, el East River y el Hudson y llegar a la meta: ¿Qué fue lo primero que sentiste?
Uff! Los sentimientos se entremezclan, lo cierto es que superado el ecuador de la prueba tenía clarísimo que tenía que terminar si o si y estaba muy mentalizado.
¿Cómo viviste la llegada a la meta?
La llegada la disfrute muchísimo, el cansancio desapareció, en el puerto de Battery Park había mucha gente gritando y animando y me sentí muy bien, satisfecho, ha sido un año de largos entrenamientos, muchos en solitario. Todo sale en esos últimos metros.
Y durante la hazaña ¿la tentación de abandonar –porque el cansancio se apodera de ti- no se cruzó por tu cabeza?
¡Ni por un segundo!
Sin duda un deportista, un nadador que “se la juega” cada vez que puede por una causa que necesita el apoyo de todos ¡siempre!
…Se llama Javier Sanz, lo tenemos “aquí”, muy cerca de todos nosotros. Y es un ejemplo al que no sólo hay que apoyar con una palmadita en la espalda o con un apretón de manos, sino que en próximas cruzadas, necesitará una vez más el apoyo de autoridades e instituciones.
Es un ejemplo y vive, sin estridencias ni petulancias, como uno más…a la vuelta de la esquina.
¡¡Bravo Javier Sanz!!
©Bayres/ALGENTE fotos© Jozef Koppelman