FELIZ CUMPLEAÑOS PARA MICKEY MOUSE
Como dijo Julie Andrews:
“Necesitamos más personajes como Mickey en este mundo.”
Y pensar que su creador, Walt Disney, con la sencillez y humildad que le caracterizaba, llegó a decir entre otras muchas frases que sólo esperaba que “nunca olvidemos que todo comenzó con un ratón”.
Un personaje entrañable que perdura aunque pase el tiempo, porque como el mismo Disney comentó “la gente se ríe con Mickey Mouse porque es muy humano, y ese es el secreto de su popularidad.”
Un ratón que, desde su creación, viene entrando en los hogares de todo el mundo y en diferentes generaciones con su personalidad y simpatía arrolladora.
Un Mickey Mouse que el pasado18 de noviembre cumplió nada más y nada menos que 90 años, fecha que recuerda su primera aparición en el año 1928 en un corto de animación.
Desde ALGENTE, queremos finalizar este año –nada fácil para tantas familias- incluyendo en nuestras páginas el recuerdo, el origen de nuestro protagonista que, desde aquel histórico debut en la gran pantalla en ‘Mickey Mouse: El botero Willie’ hasta hoy , se ha convertido en uno de los personajes animados más queridos en el mundo entero.
Un Mickey entrañable que nos acompaña con sus 90 años a cuestas pero jovial y sonriente como nunca en estas navidades, desde las que pregonamos -fervientemente- la presencia de cierta fantasía que él regala sin importarle condición y que tanta falta le hace a la sociedad.
Mickey Mouse ha unido a más generaciones que cualquier otro personaje animado.
“Es un icono global, que transmite diversión, optimismo y esperanza… Hasta estos días, Mickey Mouse-como nos recuerdan desde las oficinas Disney- ha aparecido en más de 120 cortos animados y actualmente se le puede ver en los cortos de La Casa de Mickey Mouse y Mickey y los Superpilotos en Disney Channel”.
Mickey Mouse es divertido, activo, optimista y además es un líder natural. Despierta nostalgia en los adultos y representa valores positivos para los niños…
¿Pero, cómo surgió?
Es apasionante recordar, con la ayuda de quienes forman el increíble equipo Disney que, en el citado año -1928-, unos ocho meses después de su primera aparición, su creador: Walt Disney, que entonces tenía 26 años, como productor que era “mientras iba en tren de Nueva York a Hollywood, dibujó el contorno de un ratón cuya primera animación titularon “Locos por los aviones” y después “El gaucho galopante”.
Así empezaron las primeras aventuras del ratón más famoso del mundo, pero atención, que en sus comienzos, nadie podría haber imaginado que llegaría a convertirse en lo que es hoy para todos los públicos.
A partir de aquellos “primeros pasos” “Walt no conseguía un distribuidor, fue así que, inspirado en las películas sonoras que acaban de llegar al cine, depositó sus últimas esperanzas en la grabación de una banda sonora sincronizada pudiendo añadir sonido a las ya citadas “Plane Crazy” (“Locos por los aviones”) y “The Gallopin” (“El gaucho galopante”). A partir de ahí ¡La carrera de Mickey en la gran pantalla se convirtió en una carrera imparable!”.
Y mucho más desde que aquel celuloide en blanco y negro dio paso al primer animado ¡en color!
Hace 40 años, en el 50 cumpleaños, “Mickey recibió una estrella en el legendario Paseo de la Fama de Hollywood, honor que nunca antes se había concedido a un personaje animado”.
Aquel momento se interpretó como “perfecto” para su regreso a la gran pantalla de ahí que, en 1983, se le podía ver en películas como “Una Navidad con Mickey” o “El príncipe y el mendigo”, apareciendo en largometrajes como “¿Quién engañó a Roger Rabbit?” sumándose a la lista de éxitos y a todo tipo de medallas televisivas y cinematográficas que pasaron a engrosar el curriculum vitae de este increíble personaje al que ponderan estrellas, por ejemplo, como Dick Van Dyke quien ha dicho:
“Mickey fue mi primer contacto con el humor y la comedia. El personaje siempre me resultó muy divertido visualmente. Él era el chico bueno.”
Diciembre, mes entrañable donde los haya, fue el mes en el que nació Walter Elías Disney -5 de diciembre de 1901- falleciendo el 15 de diciembre de 1966.
Antes de destacar como guionista, director, productor, animador, presentador de televisión, actor de doblaje, escritor, pintor y actor, la vida de Walt Disney que alcanzaría fama y dinero, no fue nada fácil, algo que podemos analizar si nos detenemos en algunas pinceladas de su niñez y adolescencia.
A lo largo de su dilatada carrera en el cine de animación fue premiado con 26 premios Óscar de un total de 59 nominaciones habiendo recibido, asimismo, cuatro premios honoríficos sin olvidarnos de siete premios Emmy.
Al transitar por algunos datos de su biografía, podemos saber que su padre, de antepasados irlandeses, llegó a los Estados Unidos desde Canadá, instalándose en Chicago tras casarse con una maestra de escuela, natural de Ohio y de antepasados alemanes.
Walt fue el cuarto de los cinco hijos del matrimonio.
“Cuando Walt tenía 5 años, sus padres –huyendo de la inseguridad que se vivía en Chicago- se trasladaron a una granja, en Misuri. Años más tarde, Elías Disney –su padre- enfermó gravemente motivo por el cual no pudo seguir trabajando, viéndose obligado a vender la granja, algo que fue muy duro para todos y lógicamente para Walt que era tan feliz en aquel entorno rural. La familia se instalaría en Kansas City”.
En ese entonces, quién iba a decir que aquel joven sería capaz de brindar tanta alegría a los niños del mundo entero y de varias generaciones…
“Eran tiempos duros en los que Walt y su hermano Roy se vieron en la obligación de tener que ayudar a su padre en el reparto de ese periódico, un trabajo duro que comenzaba cada medianoche hasta la mañana siguiente”.
Un día, desde que comenzó con los trabajos de animación, virtud con la que ya despuntó siendo niño con sus garabatos de colegial y, sobre todo, desde que creó a Mickey Mouse, su vida cambiaría radicalmente pero, recordemos cómo se ganaba la vida al cumplir los quince:
“Vendiendo periódicos y chucherías a los pasajeros del ferrocarril de Santa Fe. A Walt Disney le interesaban mucho más aquellos viajes en tren que ese trabajo. Llegó a convertirse en el historietista del instituto en el periódico “The Village Voice” donde destacó con sus cómics que él solía inspirarlos en temas relacionados con la Primera Guerra Mundial.”
Cuando corría el año 1918 quiso alistarse en el ejército pero fue rechazado por ser muy joven “hasta que por fin fue admitido en la Cruz Roja. Cuando terminó su entrenamiento y fue trasladado a Europa, Alemania firmó el armisticio lo que permitió que la guerra terminara y pasó el resto de su tiempo en la Cruz Roja como conductor de ambulancias en Francia, trasladando a oficiales. Una ambulancia que en su interior, fue llenando de dibujos de todo tipo, porque esa era su gran pasión.”
Al regresar a los Estados Unidos, su hermano Roy le consiguió un trabajo “en el que Walt Disney se dedicó a crear anuncios para periódicos, revistas y cines hasta que en 1922, fundó su propia empresa dedicada a realizar cortometrajes animados basados en cuentos de hadas populares y relatos para niños, como “Cenicienta” o “El gato con botas”, pero en esos tiempos que continuaban siendo difíciles, aquel estudio, quebró”.
Disney, que no cesaba en su gran ilusión de seguir adelante con su talento, decidió entonces trasladarse al floreciente centro de la industria cinematográfica: Hollywood.
“Y pudo viajar con billete de ida a California al vender su cámara, llevándose con él la película de “Alice’s Wonderland.” Así fue que llegó a Los Ángeles con cuarenta dólares en el bolsillo y una película sin acabar en su maletín. Su primer estudio en Hollywood fue un garaje en casa de su tío Robert. Envió esa película a la distribuidora neoyorquina Margaret Winkler, quien mostró un gran interés contratándole para producir más películas combinando animación e imagen real.”
Aunque la suerte parecía sonreírle tuvo que soportar nuevos infortunios empresariales, desencuentros con antiguos jefes y un etcétera que no cambiaría –a pesar de algún éxito- hasta que llegó aquel día en el que, Walt Disney, en uno de esos trenes –como ya recordamos- que tanto le cautivaban, tuvo la inspiración de crear a este Mickey Mouse que le acompañó durante su rutilante carrera de éxitos y que hoy nos acompaña en las páginas de ALGENTE…
Un Mickey Mouse que aunque no envejezca nunca, su «partida de nacimiento» asegura que acaba de cumplir 90 años ¡¡Y los que le quedan!!
En su primera aparición, Mickey servía a bordo de un barco de vapor comandado por el malvado capitán Pete Pata de Palo, que le obliga a pelar patatas cuando descubre el gusto que sentía Mickey por la música.
En aquella época, sus ojos eran dos puntos negros; sus orejas eran largas en vez de redondas y su nariz, más respingona. En esa época, nuestro protagonista ya había pronunciado sus primeras palabras: «Hot Dogs!», en «The Karnival Kid”.
…El ratón más famoso del mundo, al que originalmente puso voz el propio Disney, con el paso de los años, es hoy todo un icono mundial sobre el que Julie Andrews (expresión que seguramente rubricarán todos nuestros lectores), comentó que ¡“Necesitamos más personajes como Mickey en este mundo.”!
©Bayres/ALGENTE
Imágenes© DISNEY
Agradecimiento: Press & PR
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