EDURNE

Me encanta mi trabajo, pero necesito el refugio de mi hogar y mi familia para mantenerme cuerda”

Edurne y Eurovisión están a la vuelta de la esquina  y mientras su canción llega a todos nuestros hogares, la joven y cercana cantante, presentadora y actriz, ya empieza a dar esa fuerza y esos ánimos necesarios a quienes participen en la Vuelta Ciclista a España con su tema “Amanecer”.

Nos recibe con ese “saber estar” que regala siempre al periodista y, mientras una vez más comprobamos su espectacular fotogenia, le preguntamos:

¿Piensas que en apenas unos minutos puede llegar a latirnos más el corazón, ante medio mundo, con tu participación en Eurovisión, que en todo un mes de agosto pedaleando y pedaleando en “la vuelta”?

¡Eso espero! –comienza diciéndonos con su contagiosa sonrisa- Desde luego a mí seguro que sí. La vuelta es un evento deportivo importantísimo, con un gran número de seguidores y más de 190 países participando, pero Eurovisión no se queda atrás en cuanto a relevancia. Ojalá en ambos todos disfrutemos, y si además podemos saborear la victoria, muchísimo mejor.

¿Ganes –lo deseamos fervientemente- o no ganes, eres de las profesionales que piensan que después de un orgullo como este, siempre se gana?

Yo me sentiré ganadora si todo sale a la perfección según lo hemos concebido. Voy a buscar el mejor puesto, siempre lo he dicho. Sé que es difícil pero no imposible, y esa ilusión nos mueve cada día tanto a mí como a todo mi equipo.

¿Eres consciente de que hace tiempo Eurovisión no se le da muy bien a España?

España lleva años sin ganar, es cierto, pero quedar en el “top ten” ya es un gran logro y lo hemos conseguido en varias ocasiones, no se puede desmerecer el haber llegado a estar entre los mejores, porque ya llegar a este grupo es realmente muy complicado.

Desde aquella cuarta temporada de “Operación Triunfo” hasta hoy, la vida de Edurne ha cambiado sustancialmente.

Sin embargo, quienes la conocen de “tú a tú” no han dejado de apostar por la Edurne de andar por casa, la  Edurne García Almagro, sencilla y humilde y que todavía hoy, aunque el éxito siga haciéndola crecer, sigue mirando a los ojos cuando habla.

Vamos, que cualquiera de nuestros miles de lectores querrían a Edurne como vecina…

¿Qué tal era tu vida cotidiana, cual si fueras la vecina del quinto, antes de ser famosa?

Mi vida cotidiana es que no ha cambiado apenas. Cuando me alejo del foco mediático que me impone mi trabajo, sigo siendo una persona muy familiar y casera, que disfruta muchísimo de compartir el tiempo libre con la familia y amigos de toda la vida, y realmente es lo que me carga las pilas y me da fuerza para afrontar los días más duros. Me encanta mi trabajo, pero necesito ese refugio del hogar para mantenerme cuerda. 

Y ahora, en plena escalada ¿Has aprendido a desconectar para disfrutar ese poco tiempo que te quede libre?

Como te digo, mi forma de desconectar es rodearme de las personas que quiero y en mi casa, en la sierra de Madrid, donde sólo veo verde y escucho el trinar de los pájaros. Allí parece que el mundo se detiene y yo logro una paz que me permite realmente descansar y desconectar.

El ritmo de nuestra protagonista de primera página es de no parar, sin embargo –nos dicen- Edurne sabe organizar muy bien su agenda para que el éxito no se coma al artista como no pocas veces suele ocurrir con algunas figuras del espectáculo que no saben asimilar convenientemente ese éxito que, como decimos, puede tener dos caras…

¿Eres disciplinada, por ejemplo, a la hora de las comidas, al cumplir con tus horas de sueño estés donde estés y ese etcétera tan vital en alguien que apenas para en casa?

Soy muy disciplinada pero porque realmente no me cuesta serlo. Mi cuerpo es un reloj en cuanto a las horas de sueño, y en seguida me reclama descanso después del ajetreo. Me gusta comer de todo y especialmente la comida casera y de cuchara, y eso me facilita llevar una dieta equilibrada. Los continuos viajes me descentran un poco, pero también son experiencias interesantes, así que lo veo en positivo y procuro disfrutarlo sin agobiarme.

Perdónanos el atrevimiento, si cabe, pero ¿de dónde te “inventas” ese tiempo para estar un rato, al menos, junto a David Egea?

Todo es cuestión de organizarse, y en distancia estamos a dos horas de avión, que no supone ningún problema.

Sigamos descubriendo, gracias a la generosidad de nuestra anfitriona, a  esa Edurne encantadora que no se conoce de puertas para adentro:

Con esa sonrisa de envidia sana, con ese aspecto genial: ¿Podemos compartir contigo algún secreto de belleza? Ejercicios, litros de agua tal vez y verduras, no grasas, andar, ser feliz. ¿Qué te convierte  en una mujer” así” de guapa y natural?

Me cuido pero no me obsesiono (tampoco tendría tiempo para ello). Respecto a la piel, siempre la hidrato bien por el día y la desmaquillo y nutro por la noche, creo que es la base de un cutis sano. Cuido bastante mi pelo porque casi cada día lo someto a secadores y lavados continuos. Una buena mascarilla y productos para protegerlo tanto el color como las puntas. Y la dieta, como he comentado antes, la del sentido común, si hoy me paso, mañana compenso, y ejercicio físico siempre que puedo.

¿Cuándo eras una niña, alguna vez soñaste con ser famosa?

No exactamente con ser famosa, pero sí con cantar. Mi sueño era poder subirme a un escenario y compartir mi música. Valoro mucho el haber podido cumplirlo, y espero seguir creciendo en mi carrera profesional.

¿Cómo recuerdas tu niñez, primero y tu adolescencia?

Mis recuerdos son los de una niña muy feliz y muy soñadora, gracias a una familia estupenda que me ha dado todo el amor del mundo y el apoyo necesario para llegar hasta aquí.

¿Fuiste buena estudiante?

Sí, siempre me han ido bien los estudios, sin llegar nunca a ser una súperempollona. Cuando entre en OT había terminado mi primer curso de Veterinaria con todo aprobado, porque los animales han sido siempre mi otra pasión.

Además de cantar, poner al público de pie ¿Es uno de tus más ilusionantes proyectos abordar cada vez más la carrera de actriz?

Pues ahora mismo, desde luego me encantaría, pero siento que con la televisión he dejado otra carrera un poco a la mitad. Me ha fascinado la experiencia de presentadora y creo que me gustaría volver para asentar también esta faceta.

¿Y eso de irte a Los Ángeles, por ejemplo, para intentar hacer carrera en Hollywood, se te ha cruzado por la cabeza?

Lo cierto es que no, en ningún momento. Mis sueños van más hacia el mundo de la música, y francamente sueño mucho más con un Grammy que con un Óscar, aunque por supuesto ¡no lo despreciaría!

Lo dicho, la sencilla Edurne, “suba” o “baje” en Eurovisión con los archipopulares points de las diferentes capitales del viejo mundo, está donde tiene que estar: por su talento, su naturalidad y por ser, en este complejo mundo de hoy día, una auténtica mujer siglo XXI de los pies a la cabeza. Pero bueno, ese podría ser motivo de otro encuentro con la encantadora Edurne.

 

©Fotos: Alfredo Arias (Mediaset España) / Raúl Tejedor (RTVE)/ Valero Rioja / David Arnal / Álbum personal Edurne

Bayres/ALGENTE