EDITORIAL 104
Antes que nada, gracias por los mensajes que nos habéis dejado felicitándonos por el reportaje que dedicamos sobre el “Stop” al maltrato animal.
No merecemos “esos” piropos que nos dedican cantidad de lectores, ya que el destino final de lo que decís acerca de este tema tan de actualidad, es la gente y las asociaciones que no bajan los brazos en ese sentido.
También nuestro agradecimiento a las no menos alabanzas sobre el amplio reportaje que dedicamos a la figura de Pedro Almodóvar, dentro y fuera de los sets cinematográficos.
Comprobamos así -una vez más- que no siempre se conoce al famoso, al popular que da la cara detrás de un telón, en la firma de un largometraje, en la pequeña pantalla o en cualquier tipo de escenario.
Hay curiosidades, detalles de perfiles poco conocidos, actitudes humanas, solidarias, que van más allá de lo que hacen muchos frente a una cámara o a través de un micrófono.
Tal es el caso de quien nos ocupamos hoy como tema de portada: José Ramón de la Morena, que sigue marcando la diferencia (y en ascenso, si cabe), ahora a través de “El Transistor”, en Onda Cero.
José Ramón, auténtico líder de audiencias, nos habla de lo que hace, de algunos flecos desconocidos de su vida y, aunque no es dado a que trasciendan sus actitudes altruistas, del bien que vuelca a la sociedad desde la Fundación que lleva su nombre.
Gracias José Ramón.
Y de una “mesa de trabajo” a otra, como fue volvernos a encontrar con Eva Arguiñano quien, pese a estar “atrapada” por maravillosos cursos que imparte y de compromisos que dificultaban su encuentro con ALGENTE, al fin si pudo deslizarnos algunas “pistas dulces” para estas fiestas que no necesariamente tengan que ver con los típicos postres e, incluso, se atrevió a decirnos qué les pondría en su mesa a Dona Letizia, a Don Felipe, a Doña Sofía y a Don Juan Carlos.
Postres facilitos para los tiempos que corren.
Y cómo no pasar por el teatro donde el público, de pie, ha venido aplaudiendo al gran Héctor Alterio que, con sus joviales 87 años, sorprende dando vida a “El Padre”.
También estuvimos y pudimos maravillarnos y disfrutar de esos increíbles perros de la Guardia Civil en las instalaciones que la Benemérita tiene en El Pardo, donde con amor y exquisita profesionalidad, desde que son unos cachorros, preparan a estos animales como perros anti explosivos, antidrogas y un etcétera que tanto necesita –y les agradece- la sociedad.
Una sociedad de lo más variopinta, dispersa e inmersa en cantidad de problemas, inquietudes, necesidades en unos tiempos difíciles por múltiples razones que están ahí, en lo cotidiano, en el duro “día a día” pero que, mes a mes, reciben “Tu Revista” con los brazos abiertos y cada vez en zonas más amplias, además de los consabidos radios de distribución de Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, San Agustín del Guadalix, Las Tablas, Sanchinarro, La Moraleja, El Soto, Algete, Tres Cantos, y un larguísimo etcétera que incluye Urbanizaciones, Centros de Ocio, Plataformas Comerciales, Plaza de Castilla, Capitán Haya, Infanta Mercedes, zona de los Juzgados, Paseo de la Castellana –hasta el Ayuntamiento- y puntos de encuentros puntales en Serrano y Velázquez.
Gracias a todos.