ANA GARCÍA LOZANO: “El tiempo pone a cada uno en su lugar.”
Licenciada en periodismo, profesional de la radio y presentadora de varios éxitos televisivos la sitúan como una gran profesional.
Si su tío Manolo Escobar le hubiera pedido que encontrara el carro que perdió hace años, seguro que ella lo hubiese encontrado, pero… sin que nadie lo supiera ya que esta mujer no traspasa ‘esa línea’ de discreción que otras populares o famosas ni saben que existe por ese afán de llegar a donde sea y a toda costa.
…Dulce, amable y dueña de una sobriedad que casi no existe en este mundillo actual del faranduleo, Ana García Lozano, que fue ganando su gran popularidad hace algunos años contando las historias de los demás, esta vez, nos ha dejado ‘entrar’ en ‘su propia historia’…
Nací en Valencia. Los primeros años, mis padres tenían ‘el cuartel general’ allí. Ellos iban y venían. Yo estaba mucho con mi abuela. Después nos vinimos a vivir a Madrid donde estuve hasta los ocho años que fue cuando nos trasladamos a Barcelona. Allí estuve hasta los trece.
¿Ana, cómo se consigue ser famosa-popular, sin ‘quemar tu vida privada?
Creo que hay un acuerdo tácito entre la gente que invade la vida privada y los que no se la dejan invadir. Pienso que no es difícil preservar tu vida privada si no das razones para que se metan en ella.
¿Te preocupa tu intimidad?
Es obvio. Además no creo que mi vida privada sea interesante. Sí, puede tener cierto interés para algunas personas, pero no creo que sea parte de mi trabajo. Mi historia es la de alguien totalmente normal en la que mi profesión ha ido paralela a la de ser además una madre de familia que se lleva muy bien con su marido. Me doy cuenta de la suerte que tengo por la vida tan simple que me ha tocado vivir.
¿Sólo recuerdas éxitos o te detienes en algún apartado donde el resultado no fue el deseado?
En mi recuerdo están tanto los éxitos como los fracasos pues creo que es la manera que tienes de saber valorar después cuando algo sale muy bien, aunque decir “ fracaso” es muy relativo. He trabajado en programas que se consideraron un fracaso porque no han ido bien de audiencia pero que a mí personalmente me han enseñado mucho. En mi vida personal me considero una triunfadora y para mí eso está por encima del trabajo, con lo cual, no creo que lo que llamamos fracaso profesional pueda invadir lo que es tu vida que, en mi caso, afortunadamente es estupenda.
Pasan los años y Ana García Lozano sigue sin caer en vulgaridades que en otros casos es lo que ha catapultado a la fama a muchas otras…
Si es que todo eso no va conmigo. Afortunadamente me he podido dedicar a lo que me gusta, para lo que me he preparado y yo creo que todos los que somos periodistas y podemos estar ejerciendo la profesión de periodista, es un triunfo ya en la vida.
¿Fuiste una niña feliz? ¿Y cómo vivías las fiestas?
Súper feliz. Yo pasaba unas navidades tan divertidas, tan originales, que ya las Navidades no han vuelto a ser lo mismo años después. Recuerdo que cuando vivíamos en Barcelona, mis padres tenían siempre función en el que era el Teatro Calderón y allí pasábamos las Navidades y en Nochevieja salíamos al escenario a tomarnos las uvas tirando serpentina al público… Aunque éramos muy pequeños, nos hacían dormir una siesta larguísima esa tarde porque mi madre y mis tías, querían disfrutar de esa noche en la que aguantábamos hasta las 5 ó las 6 de la madrugada. Lo hemos pasado tan bien que ya no tiene nada que ver. Además mi padre falleció un 29 de diciembre, con lo cual, para mí las Navidades como la reciente no son lo mismo. Las sigo celebrando, claro, porque no hay más remedio, porque tengo hijos, de 15 y 17 y porque vienen los Reyes Magos, pero… He vivido Navidades muy felices y muy divertidas. Con mis primos, por los camerinos, con todos los hijos de los artistas de la compañía, íbamos al parque de atracciones todos juntos…
Ana se emociona al recordar a sus padres con los que se llevaba tan bien. “Ellos eran artistas los dos; mi madre también era cantante por lo que siempre viajaban y faltaban mucho de casa por lo que, cada vez que podía, me convertía en una niña muy viajera por eso viví una infancia muy original.
¿Cuáles son los momentos más bonitos que recuerdas de tu adolescencia?
Como he viajado mucho… Antes vivía en Barcelona y de allí recuerdo Roda de Bará, que estaba en Tarragona e íbamos cada fin de semana. Tenía mi grupo de amigos, lo pasábamos muy bien, había muy buen rollo, era mi primera pandilla, recuerdo las primeras veces que empezaba a trasnochar, a llegar tarde, que mi padre me dejase llegar a las tres de la mañana… Antes era todo más tranquilo y recuerdo también que en esa época, con catorce años, me vine a vivir a Madrid donde estuve un año interna en un colegio, algo que también recuerdo con cariño, probablemente porque fue solamente un año y sabía que aquello tenía fecha de caducidad.
¿En qué inviertes más tiempo a la hora de arreglarte?
Con el pelo no tardo mucho porque la verdad es que tengo un pelo agradecido y me lo organizo bien. Tengo el armario lleno de ‘trapos’ porque me vuelven loca y a veces tardo en encontrar lo que más me gusta para la ocasión.
¿Haces dieta?
No, nunca hago dieta, pero suelo comer sano. Como de todo, me encanta la cuchara, pero si puedo elegir en un menú que conste de fabada o ensalada de primero, procuro comerme la ensalada… En casa me encanta la sopa, hago mucho arroz con pollo, comemos mucha paella porque como soy valenciana, m encanta. Mis hijos tienen el colegio al lado de casa y no hay semana que no haga una paellita. Yo hago la valenciana, la de pollo y conejo con judías verdes…
¿Confías en la fidelidad?
Más que la fidelidad, yo creo que es lealtad. Si hablamos de la fidelidad de pareja, yo de mi marido soy sobre todo amiga, con lo cual me parecería una falta de lealtad y eso sí que no me gusta nada, porque procuro ser siempre leal y la falta de lealtad es lo que no aguanto ni en la pareja, ni en los amigos, ni en la gente que quiero.
¿Existe la palabra rencor en tu vida?
No soy rencorosa pero tengo una memoria del copón. Tampoco soy vengativa, pero tengo más memoria de las que a veces me gustaría. Si alguien me hace una faena grande, puedo sobrellevarla y estar con esa persona pero no me olvido.
¿Es fácil la convivencia contigo?
Creo que sí. Tengo mi genio pero es parte de mi carácter. Aunque creo que con los años me he apaciguado bastante. Estoy estudiando coaching y me está viniendo muy bien porque me hace ver que las cosas no son tan radicales, que hay muchos matices de gris. Me he dulcificado mucho en mi carácter, mi genio y mi temperamento. Me he hecho mucho más paciente algo que te lo da la maternidad y la vida… Sigo teniendo mi genio y mi carácter pero soy mucho más suave.
¿Qué dices de la situación actual?
Hay una situación política que es demencial, no hay día que te levantes y no veas que hay una pandilla de sinvergüenzas que están llevándoselo todo con una soltura que… Yo, que no me puedo quejar de la situación que tengo, me subo por las paredes, así que no me es difícil ponerme en la piel de muchísima gente que está viviendo una situación económica fatal.
¿Qué proyectos tienes?
Como decía, estoy estudiado coaching. Me gusta, me estoy preparando para ello y tengo algún que otro proyecto profesional. En la actualidad colaboro con algunos medios y estoy viviendo una etapa tranquila. Me gustaría estar un poco menos tranquila, sí, pero realmente la situación no es boyante tampoco en esta profesión que hemos escogido, con lo cual hay épocas más movidas profesionalmente y otras en las que hay un poquito más de sequía.
Aprovecharás entonces a disfrutar más de tu familia…
Sí, por supuesto. Estoy feliz de poder hacer la comida para que mis hijos vengan a comer a casa todos los días a pesar de que ya se saben manejar si un día tengo que estudiar fuera. No les hago tanta falta como yo creo. Aunque cuando me he ido me han dicho que les hago más falta de lo que creen.
Esperemos ver muy pronto a Ana García Lozano en la pequeña pantalla, que por lo que hizo (y cómo lo hizo) en su larga trayectoria televisiva, tiene mucho que ofrecer.
©Bayres/ALGENTE
Fotos©Liliana Cozzi
Agradecimiento Casa Mono